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¿Te estás preguntando si el mantenimiento de la estufa de pellet o de leña es obligatorio? Y bien, sí, está previsto por la ley: un técnico especializado realizará todos los controles del caso y, terminada la operación, deberá emitir un informe de control y mantenimiento que deberás conservar con cuidado para poder presentarlo en el control siguiente.
¿Es suficiente? Para nada. Si deseas una estufa de pellet o de leña que funcione lo mejor posible, debes ocuparte con regularidad de su limpieza. La limpieza de la estufa debe ser cotidiana y, por lo tanto, fácil y rápida, y debe garantizar la máxima eficiencia del aparato. Dando por descontado que tu técnico de confianza sabrá cómo instalar una estufa de pellet o de leña correctamente, queremos compartir contigo algunos consejos que te ayudarán en la limpieza cotidiana de tu estufa.
Recapitulando: tú debes ocuparte de la limpieza, y el especialista debe ocuparse del mantenimiento extraordinario. Pero, en la práctica, ¿qué puedes hacer tú directamente y qué debes hacer controlar al técnico una vez al año?
Si quieres descubrir todos los secretos para un mantenimiento perfecto de tu estufa de pellet o de leña, sigue leyendo: nuestros consejos te serán útiles para calentar tu vivienda en condiciones seguras y garantizar la eficiencia duradera de tu estufa.
Ve directamente a la sección:
LA LIMPIEZA COTIDIANA DE ESTUFAS DE PELLET Y DE LEÑA
LIMPIAR TU ESTUFA: CÓMO Y CUÁNDO
EL MANTENIMIENTO EXTRAORDINARIO DE LA ESTUFA DE PELLET O DE LEÑA, OBLIGATORIO POR LEY
INFORME DE CONTROL Y MANTENIMIENTO
CONSEJOS ÚTILES PARA EL MANTENIMIENTO ORDINARIO Y EXTRAORDINARIO DE LA ESTUFA
Las estufas de leña modernas, incluso las de más altas prestaciones, aunque en menor medida que en el pasado, generan ceniza dentro del hogar. En las estufas de pellet, la combustión es más eficiente y crea en general poca ceniza, sobre todo cuando se utiliza pellet certificado, pero esto no las exime de la necesidad de una limpieza frecuente.
Si tienes en casa una estufa de pellet o de leña, o si piensas comprar una, debes saber que la limpieza cotidiana es indispensable porque te asegura:
Una limpieza adecuada de la estufa te permite ahorrar combustible y aumentar la duración y la seguridad de tu sistema de calefacción.
Los dos tipos de estufa (pellet y leña) admiten la realización totalmente autónoma de varios trabajos. Veamos los principales.
Recuerda seguir siempre las indicaciones del fabricante -generalmente figuran en el manual de instrucciones-. El mantenimiento anual de la estufa de pellet o de leña debe ser realizado exclusivamente por personal técnico.
Si quieres saber cómo limpiar una estufa, comencemos con una premisa obligada.
Todas las operaciones de instalación, limpieza y mantenimiento de la estufa deben realizarse con el fuego apagado, con el aparato completamente frío y con el cable de alimentación eléctrica del producto y de los accesorios desconectado.
Es una condición indispensable que se debe verificar antes de realizar cualquier trabajo. Aclarado este aspecto, procedemos a la limpieza de la estufa.
Si tu estufa no tiene la tecla “limpieza automática” o si la limpieza automática no te convence, los principales trabajos que puedes realizar para facilitar la limpieza de la estufa son los siguientes:
La selección del material utilizado para la combustión es la premisa fundamental para una limpieza fácil y rápida. La leña madurada correctamente garantiza una óptima combustión y resulta ideal porque evita la acumulación de residuos e incrustaciones tanto en el vidrio como dentro del humero. Lo mismo vale para el pellet: si eliges un pellet de calidad certificada, los beneficios están asegurados. ¿No sabes cómo elegir los mejores? No te preocupes, hemos pensado en todo: lee las guías para la selección de la mejor leña y del mejor pellet.
¿Te gusta observar la llama que arde? Un pequeño placer que te será negado si el vidrio está opacado o ennegrecido por el hollín. Es no sólo una cuestión estética: limpiar el vidrio correctamente y con constancia te permite salvaguardar la integridad de las juntas evitando consumos excesivos debidos a una mayor entrada de aire en la cámara de combustión. Lee los métodos más eficaces y rápidos para la limpieza del vidrio.
Si utilizas la estufa todo el día, es inevitable que se acumulen residuos de la combustión, y si descuidas la limpieza, el buen funcionamiento del aparato podría verse afectado.
En ambos casos, para eliminar la ceniza, es necesario utilizar una aspiradora de ceniza. Una aspiradora normal no tiene un sistema de filtración adecuado para la ceniza, que es muy fina y termina depositándose sobre los muebles.
Hay otras tareas que puedes realizar autónomamente al menos una vez al año:
Considerando la función de un revestimiento y su uso normal, es suficiente limpiar el revestimiento de mayólica con un paño suave y seco. A lo sumo se pueden utilizar productos de limpieza para cerámica que no sean agresivos o abrasivos.
Para limpiar las partes de metal pintado, utiliza un paño suave humedecido con agua. No limpies las partes de metal con alcohol, diluyentes, gasolina, acetona u otras sustancias desengrasantes o abrasivas. Podrías arruinar la estufa.
La ceniza de leña natural (no tratada) derivada de la combustión de estufas o chimeneas se compone principalmente de óxidos de calcio, silicio, potasio y magnesio. ¿Qué significa esto?
Significa que, tras comprobar que las brasas estén totalmente apagadas, dejándolas en un recipiente de metal al menos 24 horas, puedes decidir cómo utilizar la ceniza:
De lo contrario, puedes arrojarla con los desechos orgánicos después de asegurarte de que no contenga cuerpos extraños / inorgánicos.
A diferencia de la limpieza ordinaria, el mantenimiento extraordinario de la estufa de pellet o de leña es obligatorio por ley. Pero, exactamente, ¿qué es y a quién debes dirigirte?
Una vez al año, normalmente al final de la temporada invernal, cuando el sistema de calefacción puede “descansar” un poco, es necesario llamar a un técnico habilitado para el mantenimiento extraordinario anual.
Se trata de una intervención obligatoria por ley que prevé algunas operaciones fundamentales como:
Después de realizar todos los controles del caso, el técnico debe restablecer las conexiones iniciales (tomas de aire, alimentación eléctrica e hídrica, sistema de evacuación de los humos); además, debe encender el aparato para verificar el funcionamiento y la correcta expulsión de los humos. La frecuencia del mantenimiento extraordinario generalmente es comunicada por los fabricantes de las estufas y chimeneas y figura en los manuales de uso y mantenimiento de los productos.
En ausencia de tales indicaciones, puedes utilizar la siguiente tabla, que indica la frecuencia de mantenimiento considerando el tipo de aparato y la potencia producida expresada en kW.
El mantenimiento de la estufa de pellet o leña -repetimos: obligatorio por ley- puede ser realizado exclusivamente por un técnico habilitado.
Esta figura especializada, después de examinar la instalación, debe emitir un informe de control y mantenimiento al propietario, que debe confirmar la recepción por escrito.
En el informe de control y mantenimiento se indican, entre otras cosas, los siguientes elementos:
¿Cómo hacer el mantenimiento de la estufa de pellet? ¿Y de la estufa de leña?
Considera la limpieza de la estufa de leña y de pellet como una inversión que, además de garantizar una larga vida al aparato, te permite ahorrar y calentar en condiciones seguras.
El mantenimiento de la estufa se divide esencialmente en dos partes:
Del mantenimiento de la estufa de pellet o de leña ordinario puedes ocuparte directamente tú con algunas acciones cotidianas, rápidas y sencillas. En general, lo que debes hacer está escrito detalladamente en el manual de instrucciones de tu estufa, o puedes seguir los consejos que hemos compartido contigo en este artículo.
Una vez al año tienes la obligación de hacer realizar el mantenimiento extraordinario de la estufa de pellet o de leña, como se indica en el manual de uso y mantenimiento del aparato.
A diferencia del mantenimiento ordinario, el mantenimiento extraordinario debe ser realizado por un técnico especializado, autorizado a verificar minuciosamente el correcto funcionamiento de la estufa. Después de inspeccionar bien el aparato, el técnico tiene la obligación de emitir un informe de control y mantenimiento que recapitule todas las operaciones efectuadas.
Sigue estos pasos sencillos y acude a personal preparado y competente para poder disfrutar del placer del calor durante todo el invierno.